La gran pregunta ¿qué debemos implementar? Marketing Performance o Marketing Digital. Pues son dos estrategias de marketing, con diferencias sustanciales, incluso podemos decir que performance hace parte de digital, con un objetivo muy claro, y es conseguir resultados a corto plazo.
Por otro lado tenemos El marketing digital que conlleva una definición estratégica con un enfoque más a mediano y largo plazo, una combinación de acciones y medios, mientras que el “performance” se centra en obtener los resultados rápidamente con un coste importante.
El performance es un modelo muy utilizado cuando las organizaciones cuentan con un músculo financiero importante y requieren la consecución de unos objetivos de forma muy marcada, en el sector de la educación lo vemos en las grandes organizaciones que dedican una parte importante del presupuesto de marketing a Performance.
Cuando hablamos de performance hablamos de un conjunto de procesos muy alineados, tecnología y equipos altamente calificados para ejecutar la estrategia, normalmente se suele contratar una agencia que lo ejecute por el nivel de complejidad y responsabilidad que conlleva implementarla.
En el performance siempre se contempla el embudo de conversión de forma integral, cuando hablamos de marketing digital trabajamos estrategias que se pueden centrar en una parte del embudo, mientras que en performance la estrategia debe ser “full funnel” o el embudo completo para poder tener la medición completa desde la ejecución hasta los resultados.
Aunque la inversión en performance puede parecer más alta al inicio es una estrategia que impacta más rápidamente la métrica del ROI y genera resultados medibles en un tiempo más reducido.
Al centrarnos en los resultados la medición es fundamental en todo el procesos, desde CISD Business, cada acción de performance se evalúa de forma diaria, gracias a la tecnología que aplicamos tenemos la capacidad de evaluar día a día los resultados.
Entre los KPIs principales que seguimos tenemos el costo por lead, el numero de oportunidades, la afinidad de la campaña (que trazamos a partir del LTR y CTR) y otras métricas que nos permiten optimizar la estrategia.
Para implementar una estrategia de marketing performance, necesitamos:
Objetivos
Aunque parezca obvio, unos objetivos claros y realistas marca una diferencia importante en la ejecución como en los resultados, no quiere decir que no tengamos objetivos retadores, pero es importante ser consecuente con lo que buscamos, así como los presupuestos que asignamos y los tiempos que nos marcamos.
Presupuesto
Una estrategia de performance requiere una disponibilidad importante de recursos, preverla cuando se definen los objetivos es fundamental, una vez inicia el proyecto no se debe detener, la fluidez de las campañas son lo que permite una optimización adecuada y por supuesto, conseguir los objetivos.
Tecnología
Adicional a la tecnología que ya aportan las plataformas (Google, Meta, TikTok, etc.) debemos contar con una web en condiciones, un CRM configurado correctamente, con sus reglas, condiciones y estructuras que puedan asimilar toda la data que se entrega. Siempre todas las herramientas conectadas y verificadas.
Perfiles calificados
Aunque el proyecto sea ejecutado por una agencia, es importante contar con un equipo interno calificado que pueda interactuar con todos los participantes, entre la ejecución de la estrategia, tecnología y el equipo comercial para poder validar la correcta ejecución de la estrategia. El conocimiento siempre debe quedar en casa.
En conclusión, marketing performance aporta:
Optimización de recursos: El control, es clave en performance, la evaluación y el seguimiento constante facilita controlar el comportamiento y ajustar en tiempo real las acciones, lo que conlleva a reducir el desperdicio en tiempo como en recursos económicos.
Crecimiento en facturación: Al centrarnos en resultados, impactamos directamente la facturación, claro, cuando la estrategia es correctamente ejecutada y los resultados son positivos.
Mejores oportunidades: Todos los esfuerzos y la tecnología se centra en impactar prospectos alineados a la marca y la evolución de las campañas consigue mejorar el foco hacia el que nos dirigimos.
Consecución de resultados: El marketing performance tienen una finalidad netamente de resultados.
Por otro lado, y no menos importante, el marketing digital hace referencia a un conjunto de estrategias de marketing que utiliza diversos canales y recursos para posicionar una marca, mejorar la credibilidad, amplificar el alcance y por supuesto, generar un mayor número de clientes potenciales.
En una estrategia de marketing digital encontramos:
- Publicidad online
- SEO
- RRSS (orgánico y de pago)
- Marketing de contenidos
- Email marketing
- Partners
- Influencers
- Podcast
El marketing digital es una pieza clave para el desarrollo de un negocio, la combinación adecuada de estrategias, medios, recursos y público objetivo consiguen una gran variedad de resultados que tienen como fin incrementar el conocimiento de la marca y el crecimiento en ventas.
Al igual que en performance las métricas son la base de su evolución, se trabajan KPIs similares que facilitan la evaluación de las acciones.
¿Qué aplicar?
No hay una respuesta correcta o incorrecta, la decisión debe partir de una evaluación concienzuda de que tenemos y que queremos conseguir. Una institución posicionada, reconocida que no está llegando a sus números puede centrarse más en performance mientras que otra institución menos reconocida en un proceso de crecimiento puede requerir una estrategia más a largo plazo cuyo interés principal sea el posicionamiento aquí podemos hablar más de digital.
Desde CISD Business todos nuestros proyectos inician con una evaluación inicial de situación, que nos ayuda a definir el mejor camino a tomar, encuentra en nuestra Definición de estrategias enfocadas a resultados como tomar la mejor decisión
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